Pequeño pelirrojo

50 2 0
                                    

El nunca se sintió amado por lo menos en ninguna de sus innumerables relaciones en donde el sexo era lo único relevante. Alexander solo pedía algo mas que una noche de revolcón, con una persona que lo recibiera al llegar a casa y que lo despertara en las mañanas con una sonrisa y un dulce beso en los labios,pero el destino solo le ponia enfrente a personas que lo único que querían de el era dinero y un poco de fama, así que desapareció todo tipo de pensamientos de decepción y angustia, pensó que no existía algo como el amor, ese sentimiento tan bonito de la cual todo el mundo hablaba, pero el no lo veía, no lo sentía, sólo desistió por que esas cursilerías por experiencias propias sólo lo ponían blando para que cualquier persona le viera la cara de estúpido al ver como sufría al terminar una relación.
Pero nunco contó con que por azares del destino conociera la persona que le pondría el mundo al revez .

***********

Tenía casi 30 llamadas perdidas y 25 mensajes de su mánager, Thomas. Pero no tenía intenciones de contestar, hace como 5 horas que nadie sabía nada de el y Alex sólo quería un respiro, eso de las sesiones fotográficas, el modelaje y las reuniones a las cual tenía que asistir ya que se estaba dando a conocer en el mundo de la fama, lo agobiaba un poco y es que todos querían firmar un contrato con el, por que aún que el azabache no lo reconociera tenía un don para esto y la gente se daba cuenta, las chicas en las calles si lo reconocían se volvían locas, trataban de colarse en su casa y.....era un caos!! El obviamente no estaba acostumbrando y seguro que muchos artistas reconocidos mundialmente tampoco aguantaba esta presión pero Thomas le dijo que se relajara, ya se acostumbraría.....sin embargo el escaparía un rato.

Y hay se encontraba caminando sin un sendero fijó que lo guiará en las calles de Nueva York una ciudad muy movida pero perfecta para entretenerse en ella , cubierto hasta la cabeza con lentes de sol negros y una gorra negra con un estampado nike, no quería correr riesgos y que se arruinaran sus planes por un par de chicas locas. Perdido en sus pensamientos llegó a parar en una zona fea de la ciudad, edificios escasos de pintura y llenos de grafitis,las calles sucias y uno que otro indigente, para cualquier persona esto sería una alerta para devolverse por donde vino, pero Alexander era de reacción impulsiva, el no le tenía miedo a nada, quería. Curiosear un poco y después se iría.

Caminaba Con paso lentos hasta que ciertos ruidos le llamaron la atención.

No! Por favor suelteme! Juro que no volverá a pasar...yo sólo quería-la voz frágil llena de miedo fue interrumpida rápidamente

Callate maldito mocoso! Esta será la última vez que pongas tus asquerosas manos en mi negocio- sonaba muy furioso aquel hombre que gritaba Zanganeando al pobre chico.

Este tipo de escena Alex no podía simplemente pasarla por alto, le recordó a su familia ya que con ella vivía llena de injusticias y no soportaba el hecho de que otros pasarán por lo mismo, no aguanto seguir presenciando aquello y rápidamente fue corriendo hacia el alboroto que se formaba.

Esto es lo que les pasa a los ladronzuelos como tu!- grito el hombre alzando su puño para pegarle de lleno en el rostro del chico
Ya por favor!!! Pare! -Decía el chico en gritos y lágrimas soportando aquellos golpes y patadas que les propinaba aquel hombre cegado por la furia. Perdía la conciencia cuando ya no sintió golpes impactado en su cuerpo.

Hey!- escuchaba lejos, no podía mantener sus ojos abiertos-despierta! Despier...ta

Cuando vio al hombre golpear cruelmente al chico ya casi inconsciente, se fue toda la cordura que tenía lanzándose encontrar del hombre para apartarlo ágilmente del niño, y romperle la cara a puñetazos.

Que te pasa bastardo!!? No ves que sólo es un niño??- grito para darle una patada tan fuerte en el estomago que Tosió sangre- ya!- tosió, sintiendo innumerables golpes -para...por favor- aquel tipo ya casi no podía articular palabra.

A little loveDonde viven las historias. Descúbrelo ahora